Magistrados irresponsables por punta y punta
Olvidan que con sus fuertes cuestionamientos dejaron en situación de alto peligro la seguridad de la Juez y su familia.

Luis Alfonso Ossa B./Opinión/El Pregonero del Darién
Los Magistrados del Tribunal Superior de Bogotá amanecieron muy temerosos quejándose por el peligro en el que han quedado(???) posterior a las críticas que ha hecho el presidente Petro respecto al fallo suscrito por ellos exonerando al Presidente Uribe de toda culpa.
Hoy los ciudadanos nos preguntamos si los magistrados no pensaron en el inmenso peligro al el que iban a exponer a la Juez Sandra Heredia, la misma que condenó a Uribe, cuando en las redacción del fallo absolutorio que ellos aprobaron, con el sólido salvamento del voto negativo de la tercera magistrada, arremetieron contra la Juez Heredia , desbordándose en descalificaciones desobligantes en su contra exponiendo con ello eso sí la seguridad de la Juez y su familia ante la fanaticada obsecuente que adora a Álvaro Uribe y que ante semejantes calificativos contra ella, expuestos en la sentencia absolutoria, terminaron dejando en una situación de alto riesgo a la juez y a su familia.
Reivindican con todo razón los respetados magistrados del Tribunal Superior de Bogotá su seguridad, pero olvidan que con sus fuertes cuestionamientos dejaron en situación de alto peligro la seguridad de la Juez y su familia.
Es grave que el Presidente cuestione el fallo de cualquier juez, del cual le es permitido
disentir más no cuestionar, pero más grave es aún que los dos magistrados del Tribunal Superior de Bogotá, los que se sienten hoy inseguros por culpa del cuestionamiento del Presidente a su fallo, hayan terminado denigrando de la Juez Sandra Heredia, de cuyo fallo se ocupaban, dejándola prácticamente en la Picota pública, y lo peor es que estos maltratos verbales de los que hicieron víctima a la Juez, aparecen en el contexto general de la sentencia como parte sustantiva de la fuerza argumentativa del fallo. Qué grave fue esto Señores Magistrados!! Esta valerosa juez y su familia ahora están abocadas a refugiarse en cualquier lugar del mundo para evitar ser asesinados por los resentidos fanáticos a quienes le habían tocado su ídolo con la condena que ella profirió !!!
Ataque a la justicia
“Ataque a la independencia judicial. Demandan a la magistrada que salvó su voto en la absolución a Álvaro Uribe”
Por supuesto que la secta que tiene a Uribe como el más grande Colombiano del Siglo, tenía que reaccionar así contra quien son su salvamento del voto logró desdibujar el triunfo espurio de la defensa de Uribe mostrando el envés de la posición absolutoria de los otros dos magistrados que desmontaron la sólida condena de primera instancia, la misma que ya quedó así para la historia aunque no para los estrados judiciales por el fallo absolutorio que dos de los tres magistrados profirieron.
El salvamento del voto de la tercera magistrada nos mantiene la esperanza de que en en el aparato de la justicia no todo está perdido!!
Otro golpe a la consulta
“Pacto Histórico no podrá usar su logo para la consulta del 26 de octubre, dijo el Consejo Nacional Electora. – La Silla Vacía”
Con semejante carga de profundidad el Concejo Nacional Electoral hace añicos la fortaleza mayor del Pacto Histórico cual es la de asistir con un candidato único a la gran consulta con los demás grupos de centro izquierda con miras a escoger un candidato único por el frente amplio que enfrente a la derecha colombiana agrupada seguramente al rededor del centro Democrático. Pero por lo que estamos viendo esa derecha ordenó a sus mandaderos en el CNE que se armaran de cuanta trampa pudieran para comenzar a resquebrajar desde ahora la eventual fortaleza de la izquierda cual es la construcción de una gran unidad de todas las fueras progresistas al rededor del Pacto Histórico
Zonas de protección
“En Medellín ordenan suspensión de cuatro obras irregulares en zona de protección ambiental – BluRadio”
Si las construcciones se están levantando en zonas de protección ambiental no es esta una razón suficiente para ordenar su demolición en vez de que las autoridades estén averiguando si cumplen o no las normas técnicas de construcción, lo que deja de ser importante en tanto que la transgresión a la ley se ha dado por construir viviendas invadiendo zonas de protección ambiental.
Cumplan o no las normas de construcción esas viviendas deben ser demolidas y cuantificado el daño ambiental que produjeron allí, para que quienes lo hicieron resarzan al municipio por el flagrante daño ambiental cometido en ese que es espacio público inenagenable.
Predios en manos criminales
“42 % de los predios entregados por los ‘paras’ están ocupados ilegalmente; Gobierno plantea comprarlos pese a medidas judiciales” (El Tiempo)
Qué investiguen quienes son los que han usufructuado fraudulentamente esos predios entregados por los Paras para reparar a sus víctimas y seguramente encontraran que son Grandes Terratenientes de los partidos tradicionales que no han hecho sino torpedear la política de reparación a las víctimas de lado y lado!!
Lo increíble es que el gobierno, de buena fe, pretenda ahora comprarles a esos defraudadores de las victimas esas tierras que legalmente no les pertenece.
Cuál Paz Total se puede construir cuando se tienen enemigos tan poderosos que no han hecho sino beneficiarse en forma personal del caos que la violencia ha generado y por eso su interés consiste en mantener dicho caos para preservar los beneficios fraudulentos como lo dice la crónica del Tiempo.
Trupm el Torquemada moderno
“En Estados Unidos prohíben la circulación varios libros de reconocidos autores, entre ellos Gabriel García Márquez”
Como se siente de recalcitrante la decisión de Trump de sacar del escenario de la cultura un montón de obras de la literatura universal, que como a la usanza de la edad media podrían ser quemadas en la pira pública como aquellas obras del Index Librorum Prohibitorum que bajo las directrices de Torquemada fueron proscritas de las bibliotecas de la Iglesia Católica en el mundo. Se convierte Trump entonces en el Torquemada moderno recreando en la sociedad americana a la que ha condenado a caminar por caminos de la decadencia, a reeditar las épocas aciagas de la inquisición.
Sin garantías
Álvaro Uribe exonerado de toda culpa, el presidente Petro metido en la lista Clinton !! y Álvaro Prada, convicto sostenido a la fuerza para que el Concejo Nacional Electoral se le atravesara a la unión del Pacto Histórico negándole por tanto personería jurídica como partido pólitico unitario,… puede acaso pensarse que los sectores progresitas del país quedamos con las garantías suficientes para asistir tranquilos a las elecciones del 2026?
Votar por la psiquiatra
Bueno candidata, si no lo ha leído hágalo para que se divierta con este buen escrito que alguien , a quien, a quien desconozco, le ha dedicado con acierto y diversión !!! Me llaman loco y votaré por la Psiquiatra
La locura en botella y su sacaCorchos
Un país bipolar entre la hostia y el fusil
Por Keshava Lìévano
Colombia no necesita meteorólogos, sino psiquiatras. Aquí las estaciones son emocionales: amanecemos revolucionarios, almorzamos neoliberales y dormimos rezando por el dólar. Somos un país que se persigna antes de matar y que mata antes de pensar. Un país de santos armados y pecadores con sotana.
Carolina Corcho no cura resfriados: intenta sanar repúblicas. Psiquiatra, exministra y enemiga jurada del silencio, insiste en que Colombia no está enferma de izquierda ni de derecha, sino de hipocresía crónica. Habla como quien diagnostica a un paciente que ya se acostumbró al delirio.
No se emociona ni declama: expone. Sus frases suenan a bisturí verbal, cortan la grasa del discurso y dejan el músculo al aire. Cuando fue ministra, intentó ponerle lógica a un sistema de salud que solo funcionaba con fe. Y claro, la fe se ofendió. Las EPS, devotas del diezmo corporativo, sintieron que la doctora estaba a punto de arruinarles el negocio del dolor.
—Colombia no está enferma, está maltratada —dijo.
Y medio país pidió segunda opinión… al noticiero.
El síndrome nacional de pensar demasiado
A Carolina la llaman radical, como si pensar con argumentos fuera un trastorno. Pero ahí está, con su diagnóstico sereno: este país confunde la opinión con el dogma y la política con el púlpito. Aquí todo se discute en clave de rosario o fusil: o eres hijo de la Virgen o del Diablo, no hay término medio.
Los políticos la escuchan como quien oye al médico decir “no más fritos”: asienten, prometen cambiar y siguen igual. La ministra no se inmuta. Tiene el temple de quien ha atendido a un país con ansiedad generalizada y ataques de mesianismo desde el primer turno.
—Doctor, el paciente no mejora —dice el asistente.
—No se preocupe —responde ella—. Es que sigue viendo noticieros.
-Razones médicas (y poéticas) para una presidenta mujer
Porque los hombres ya probaron todo… menos leer el manual.
Porque una mujer sabe administrar la escasez sin robar: si logra pagar el arriendo, dar estudio a los hijos y cocinar con media libra de arroz, imagina lo que haría con el presupuesto nacional.
Porque una presidenta no ofrece “mano dura”, sino tratamiento integral. No se trata de castigar, sino de sanar.
Porque la empatía también es una política pública. Y Carolina la recetaría sin copago.
Porque ya es hora de que el poder tenga acento de abuela, ritmo de olla y olor a guayaba.
Diagnóstico final (con pronóstico reservado)
Si algún día Carolina Corcho fuera presidenta, no haría campaña: haría consulta externa. Llamaría al gabinete por su nombre clínico:
—Hacienda, hipertenso crónico.
—Defensa, en negación severa.
—Congreso, con adicción al privilegio.
Mientras el país se queja del cambio de dieta, ella sonreiría con la calma de quien sabe que los milagros no se decretan: se trabajan.
Pero ni siquiera ella está exenta del virus nacional: el fundamentalismo ideológico. Porque las mujeres de su propio partido —esas que gritan “revolución” con tono de catequesis— pueden llegar a ser más dogmáticas que el obispo, más radicales que el general y, paradójicamente, más machistas que el Papa.
Colombia, al fin y al cabo, es un manicomio donde todos quieren ser director.
Y Carolina, con su sacaCorchos en mano, apenas intenta que la locura no se sirva sin receta.
(Ofrecemos disculpas a los lectores ante la omisión de la columna del doctor Luis Alfonso Ossa la semana anterior, responsabilidad única de la dirección)






