“Latinoamérica debe construir su futuro”
Eso incluye “una OTAN suramericana independiente de los intereses de los Estados Unidos, independiente de los intereses de Rusia, que pueda hablar en el mundo con voz propia.
						La propuesta fue esbozada por el mandatario colombiano en el marco de su gira por los países árabes que culminó este lunes en el Estado de Catar.
En entrevista a la cadena de noticias Al Jazzeera, expresó que “el camino de Sudamérica y de Latinoamérica no es meterse en un bloque económico en competencia uno u otro, sino que es construir nuestro propio polo de desarrollo autónomo y soberano».
Eso incluye “una OTAN suramericana independiente de los intereses de los Estados Unidos, independiente de los intereses de Rusia, que pueda hablar en el mundo con voz propia, de acuerdo con nuestros propios intereses, y buscar el diálogo de la humanidad».
Enfatizó que “lo que se debe pensar es en un diálogo entre civilizaciones. El choque entre civilizaciones lleva a la barbarie, que es lo que estamos viendo, y Gaza es el ejemplo, el Caribe le sigue. Mientras que el diálogo entre civilizaciones lleva a la sabiduría, a una humanidad libre».
Consideró que solo de esta manera, la región podría “asumir los retos de superar los principales problemas actuales, descarbonización, desigualdad, pobreza, esclavitud en muchos sectores de la humanidad» y a una “reconstrucción desde otro punto de vista, desde la descarbonización, para competir, aún dentro del capitalismo».
En ese escenario, dijo, “Estados Unidos podría quedarse atrás si insiste en el petróleo, como está haciendo Trump; atrás en la tecnología, atrás en el conocimiento». Pero si el país del norte reconsidera esa postura, “América del Sur sería su mayor aliado, porque es lo más cercano que tiene en energías limpias».
El narcotráfico
Como ejemplo de ese cambio señaló la lucha contra el narcotráfico, la cual no se soluciona “tirando misiles sobre lanchas donde va gente que es joven y pobre, porque los que manejan lanchas son personas de las islas del Caribe que se dejan contratar por los narcotraficantes para ir de lugar en lugar hasta que esas mercancías llegan a los Estados Unidos, cada vez llega más a Europa».
Recalcó que el negocio ilícito ha cambiado, “el narcotraficante no está viviendo en el cultivo de hoja de coca de Colombia, ahí viven campesinos golpeados por la violencia desde hace décadas en zonas semiselváticas y alejadas. Y en las lanchas tampoco van los narcotraficantes, allí van jóvenes que no tienen universidad, no tienen oportunidad».
Las mafias en el mundo de las drogas se transformaron y “el narcotraficante está donde está el lujo porque tiene mucho dinero y el lujo está cerca al gran parque de Nueva York, está en Miami, está en París, está en Dubái, con grave peligro sobre las sociedades árabes. Y el narcotraficante ya no es un colombiano, es mexicano, albanés, italiano, francés y de Kosovo».
Por lo tanto, subrayó, “tenemos una codicia en el gobierno de los Estados Unidos por quedarse, ha sido así desde atrás, con el petróleo como insumo básico de su economía y su gran capital, y eso no se soluciona el narcotráfico de la cocaína».
					
				





