Crisis Diplomática: Ataque en Doha Amenaza Negociaciones por Gaza
Líderes árabes condenan ataque israelí en Doha y urgen alianza defensiva, fracturando las negociaciones por Gaza.
17 de octubre de 2023
La escena internacional se ha visto sacudida por una crisis de graves proporciones tras el ataque israelí contra líderes de Hamás en Doha, capital de Qatar. Este hecho, calificado como una agresión a la soberanía de un estado mediador, ha provocado una contundente respuesta unánime de los líderes árabes e islámicos en una cumbre de emergencia y ha puesto en jaque los frágiles esfuerzos por alcanzar un alto el fuego en la guerra de Gaza, al tiempo que recibe el apoyo explícito de Estados Unidos.
La Respuesta Árabe: Unidad y Condena en Doha
Los líderes de naciones árabes e islámicas se reunieron de emergencia en Doha para condenar el ataque israelí y articular una respuesta común. La cumbre, convocada a raíz del bombardeo en suelo qatarí, buscaba más que emitir una declaración de principios. En una resolución unánime, los países instaron a la formación de una alianza política y defensiva para hacer frente a lo que denominaron «amenazas de Israel».
El tono de las intervenciones fue particularmente duro. Un representante qatarí expresó la indignación general al cuestionar: «¿Cómo vamos a recibir en nuestro país a delegaciones negociadoras de Israel si quienes envían esas delegaciones planean bombardear nuestro país?». Esta retórica refleja una profunda fractura de confianza. La cumbre exigió medidas concretas —diplomáticas, legales y económicas— para presionar a Israel y forzar el cese de su ofensiva en Gaza, yendo más allá de las meras condenas verbales.
El Doble Juego Diplomático: Estados Unidos e Israel
El evento ocurrió el mismo día de una visita clave a Jerusalén del secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken. Blinken no solo dio un espaldarazo a Israel en su campaña para eliminar a Hamás, grupo considerado terrorista por Washington, sino que también afirmó que su gobierno sigue centrado en el papel mediador que Qatar podría desempeñar.
Al ser preguntado sobre si fueron advertidos del ataque en Doha, Blinken optó por una postura pragmática, señalando que Washington se enfoca en «lo que va a pasar después y no lo que pasó antes» y en la liberación de los rehenes aún cautivos. Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, asumió toda la responsabilidad por la decisión de actuar en Qatar, defendiéndola como una acción necesaria y «totalmente independiente» argumentando que «no se debe dar refugio a terroristas».
Implicaciones Geopolíticas: Un Acercamiento Árabe en Peligro
El ataque y la posterior cumbre amenazan con echar por tierra los históricos acuerdos de normalización entre Israel y varias naciones árabes. Analistas presentes en la cobertura señalaron que el objetivo de los Acuerdos de Abraham, de los que se cumplen cinco años, era lograr una «paz cálida» con países como Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y potencialmente Arabia Saudita.
Sin embargo, esta «paz caliente no parece que vaya a suceder de ninguna manera en el futuro próximo». La distinción hecha por el presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sisi, entre el gobierno israelí y su sociedad, es reveladora de la profundidad del malestar. Se especula que si Israel continúa con sus planes de anexión en Cisjordania, socios clave como Emiratos Árabes Unidos se verían forzados a «revisar todo este asunto», lo que supone un grave retroceso diplomático.
La Crítica Situación Humanitaria en Gaza
Mientras la diplomacia se desarrolla en capitales extranjeras, la situación sobre el terreno en Gaza se deteriora rápidamente. El ejército israelí sigue destruyendo infraestructura y advirtiendo a los habitantes de la ciudad de Gaza que evacuen la denominada zona humanitaria en el sur del territorio. Estas órdenes de evacuación obligan a cientos de miles de personas a huir una vez más, adentrándose en una crisis humanitaria sin precedentes.
Las esperanzas de un cese al fuego sufrieron un duro revés con el ataque en Doha, que socavó directamente la credibilidad de Qatar como mediador neutral. No obstante, el emirato ha reiterado su compromiso de seguir trabajando con Egipto y Estados Unidos para alcanzar un alto el fuego, en un intento por salvar los restos de un proceso de paz ahora más frágil que nunca.
La guerra en Gaza, iniciada tras el ataque del 7 de octubre, ha entrado en una fase crítica donde las acciones militares y las decisiones diplomáticas se entrelazan con consecuencias imprevisibles. El llamado a una alianza defensiva árabe marca un punto de inflexión potencial, regresando las tensiones regionales a un estado de confrontación que muchos creían superado. El camino hacia la paz parece ahora más lejano y empedrado de desconfianza y retaliaciones.