
Diciembre- de 2020. La Asociación de Bananeros de Colombia (Augura) presentó el balance del año 2020, donde destacó el esfuerzo de afiliados, el sindicato, colaboradores, en general de todos los actores de la agroindustria y de las entidades gubernamentales, para continuar las exportaciones de la fruta, principalmente a la Unión Europea y Estados Unidos, en medio de las dificultades de la pandemia y del hongo Fusarium Raza 4 Tropical.
“Este sin duda fue un año retador, tuvimos situaciones complicadas y el mundo se vio obligado a cambiar su dinámica de consumo y estilo de vida. Desde Augura actuamos con prontitud en la implementación de los protocolos de bioseguridad para poder seguir abasteciendo de la fruta al mercado internacional. Además, sentimos la necesidad de acompañar a las comunidades en las regiones donde tenemos presencia, como es el caso de Urabá y Magdalena, y fue así como nos unimos con instituciones públicas y privadas para realizar una serie de donaciones que mitigaran el impacto del COVID-19, tanto en alimentos como en recursos económicos con más de $2.300 millones para fortalecer el sistema de salud”, aseguró el presidente de Augura, Emerson Aguirre Medina.
Augura destacó el reconocimiento de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y del Ministerio de Trabajo, quienes exaltaron el protocolo de bioseguridad y el trabajo en equipo.

De igual forma, el presidente del Gremio aseveró: “nos sentimos muy complacidos de trabajar articuladamente con Sintrainagro, sin duda esto hace la diferencia y se ve reflejado en los resultados ágiles y efectivos. Adicional a los temas de la contingencia mundial, nuestro trabajo en el 2020 estuvo enfocado en prevenir y controlar el Fusarium Raza 4 Tropical”.
Finalmente, la Asociación informó que la gran inversión para la implementación del protocolo de bioseguridad a raíz de la pandemia, además de los recursos para continuar la lucha contra el hongo Fusarium Raza 4 Tropical y el encarecimiento de insumos por los altibajos del dólar, hizo que no fuera un año sencillo para continuar exportando el tercer producto del agro colombiano. Sin embargo, se logró apoyar la canasta familiar de Colombia y el mundo, y por ende garantizar el sustento de 150.000 familias que viven de esta industria, mediante la generación de 35.000 empleos directos y 120.000 indirectos a nivel nacional.