Varios de los líderes que participan en un paro campesino, que afecta varios municipios del Chocó y Mutatá en Antioquia, se han quejado del bajo perfil y la poca capacidad para resolver sus reclamos, de la comisión enviada desde la gobernación de Quibdó y que incluso ni el alcalde de Riosucio, ha llegado a la mesa de negociaciones.

“Esta mañana acordamos permitir el paso de los vehículos represados en una zona intermedia entre Piedras Blancas y Mutatá, pero a esta hora la vía continúa cerrada” dijo uno de los voceros del paro.
Sin embargo, al caer la tarde, los disturbios volvieron al sector de Caucheras, la bifurcación entre la vía a Bajirá y la Vía al Mar, con obstrucción de la carretera y quema de llantas.

Entre las reclamaciones de los manifestantes, aparecen: el avance de la minería ilegal que los está dejando sin agua y con grandes afectaciones a los recursos naturales en general, el mal estado de las vías, construcción y adecuación de escuelas y colegios, además de un puente en el sector de Brisas, sobre el Curvaradó, legalización de predios, restitución de tierras, problemas de catastro, la formalización y legalización de un resguardo indígena, entre otros.



